Estás presente
en la fuente escondida,
en la flor que se abre,
en el ave al volar.
Estás presente
en la estrella lejana,
en las luces del alba
y en las olas del mar.
Estás presente
en la noche callada,
en la bulla y la vida,
el descanso y la paz.
Estás presente
porque lo animas todo,
porque lo llenas todo,
porque a todos te das.
Estás presente
en mis grandes silencios,
en mis ratos de espera,
en la serenidad.
Estás presente
en la dicha profunda
de quien ve sus anhelos
hacerse realidad.