El colegio es barco grande
anclado siempre en el puerto.
Y ve cómo tu barquilla
se despega mar adentro.
Hoy se rompen las amarras
e hinchan tu vela los vientos,
mientras que dices adiós
con tu pañuelo.
El Colegio es una estrella
con resplandor de lucero.
Cada vez que alces los ojos
te alcanzarán sus destellos.
El Colegio es una estrella
fija en tu cielo.
El Colegio es una mina
que guarda riquezas dentro.
Qué bien si tú te encontraste
algún tesoro en su seno.
El Colegio es una mina
y tu fuiste su minero.
El Colegio es una siembra
y variado el terreno.
Gozarás cuando florezcan
las semillas de tu huerto.
El Colegio es sementera
de fruto incierto.
El Colegio es como un río
que bulle en su cauce, inquieto.
Agua que viene y se va...
y él queda con su misterio.
Paisaje siempre dinámico,
y siempre bello.
El Colegio es una música
que lleva lejos sus ecos.
Aprende bien la canción
que tienes que cantar luego.
Cántala, tú, colegiala,
Canta niña de tercero.
Alegra a un mundo que sufre
y olvida el bien y lo bello.
Cántala para que él cante
también su cántico nuevo.
Y ten presente, no olvides
cuando tú empuñes los remos...
que el Colegio es barco grande
y sigue anclado en el puerto.
El te impulsó a navegar
mar adentro.
Consuelo Ojeda