Jeremías dice: Entonces me fue dirigida la palabra del Señor en estos términos: Antes de haberte formado yo en el seno materno, te conocía, y antes que nacieses, te tenía consagrado; yo profeta de las naciones te constituí. Yo dije: «¡Ah, Señor! Mira que no sé expresarme, que soy un muchacho.» Y me dijo el Señor: No digas: «Soy un muchacho», pues adondequiera que yo te envíe irás, y todo lo que te mande dirás. No les tengas miedo, que contigo estoy yo para salvarte, dice el Señor.
Jeremías 1,4-8
Jesús dice: «Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo al padre: "Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde." Y él les repartió la hacienda. Pocos días después el hijo menor lo reunió todo y se marchó a un país lejano donde malgastó su hacienda viviendo como un libertino. Cuando hubo gastado todo, sobrevino un hambre extrema en aquel país, y comenzó a pasar necesidad. Entonces, fue y se ajustó con uno de los ciudadanos de aquel país, que le envió a sus fincas a apacentar puercos. Y deseaba llenar su vientre con las algarrobas que comían los puercos, pero nadie se las daba. Y entrando en sí mismo, dijo: «¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen pan en abundancia, mientras que yo aquí me muero de hambre! Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, pequé contra el cielo y ante ti. Ya no merezco ser llamado hijo tuyo, trátame como a uno de tus jornaleros. Y, levantándose, partió hacia su padre. Estando él todavía lejos, le vió su padre y, conmovido, corrió, se echó a su cuello y le besó efusivamente. El hijo le dijo: "Padre, pequé contra el cielo y ante ti; ya no merezco ser llamado hijo tuyo." Pero el padre dijo a sus siervos: "Traed aprisa el mejor vestido y vestidle, ponedle un anillo en su mano y unas sandalias en los pies. Traed el novillo cebado, matadlo, y comamos y celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado. Y comenzaron la fiesta.
Lucas 15,11-24
Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él, no es juzgado; pero el que no cree, ya está juzgado, porque no ha creído en el Nombre del Hijo único de Dios. (Jn. 3, 16-18)
Si gozar quieres de veras
de esta sublime ambición
será con la condición
— y creo que vale la pena—
de una total negación.
Nada podrás reservar
por muy pequeño que sea.
Si quieres hacer la prueba
verás que no encuentras paz
en cuanto todo no entregas.
No quieras contemplaciones,
que no hay tiempo que perder,
ni humanas consolaciones,
ni des otras soluciones
que rendirte de una vez.
No exijas otras veredas
ni otro camino tomar,
que toda la ciencia está
en esa "Nada" que lleva
a sólo Dios encontrar.
Cruz, pobreza, soledad,
abrazadas por amor
te darán la libertad.
Y con gozo exclamarás:
Sólo contigo, Señor.
Madre Belén
14-9-1962
* ¿Cómo estás?... Preguntas fáciles para respuestas largas y complejas…
* Ser peones de nuestra propia vida ¿Quién si no?
* Pastoral a pie de obra, en los caminos de la vida, regalando tiempo y acogiendo cariñosamente las molestias propias de estar en construcción.
* Si el Señor no construye la casa, en vano se cansan los albañiles…
* Hay situaciones en las que lo mejor es reducir la velocidad: ¡estamos en obras!
* Preparad el camino al Señor, … ¡Preparemos nuestra vida para el Señor!.
* ¡Algo nuevo está pasando! ¡Estamos en construcción! ¡ No lo notáis!...
* ¡Bienaventuardos aquellos que se saben en camino, en proceso, en construcción, porque son dueños de su verdad y amigos de la humildad!
* …
* Y a ti… ¿qué te sugiere?
Hasta ahora hemos hablado de los personajes del cuadro. Pero no nos hemos dado cuenta de un detalle de bulto. El autor ha renunciado a pintar a Jesús precisamente para meternos a nosotros, espectadores, en el cuadro. En realidad, lo que quiere provocar es que nosotros veamos las cosas como las ve Cristo. Es más, quiere hacernos sentir lo mismo que siente Cristo.
Después de haber reparado despacio en cada uno de los personajes que componen la escena, ponte en el lugar del Señor lugar, coge el pan y el vino. Mira a los ojos a estos personajes que están esperando tus palabras. ¿Qué les dirías? Pronuncia las palabras de Jesús: Tomad mi cuerpo, ¿estarías dispuesto/a a entregar tu cuerpo por alguien que lo necesite?, ¿por quién? Levanta el cáliz y di: “Tomad y bebed de mi sangre que será derramada por vosotros”. ¿Estarías dispuesto a derramar tu sangre, a comprometerte hasta tener problemas?Contempla despacio el cuadro y medita. Deja que te hable al corazón. Apunta todos tus sentimientos e ideas.
Canto
Salmo
Alabad, siervos del Señor,
alabad el nombre del Señor.
Bendito sea el nombre del Señor,
ahora y por siempre :
de la salida del sol hasta su ocaso,
alabado sea el nombre del Señor.
El Señor se eleva sobre todos los pueblo,
su gloria sobre los cielos.
¿Quién como el Señor, Dios nuestro,
que se eleva en su trono
y se abaja para mirar
al cielo y a la tierra ?
Levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre,
para sentarlo con los príncipes,
los príncipes de su pueblo ;
a la estéril le da un puesto en la casa,
como madre feliz de hijos.
salmo 112
Lectura
Al llegar el día de Pentecostés, estaban los discípulos reunidos en un mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso, que llenó toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos; quedaron todos llenos del Espíritu Santo y se pusieron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse. Había en Jerusalén hombres piadosos que allí residían, venidos de todas las naciones que hay bajo el cielo. Al producirse aquel ruido la gente se congregó y se llenó de estupor al oírles hablar cada uno en su propia lengua. (…) Entonces Pedro, presentándose con los Once, levantó su voz y dijo: «Judíos y habitantes todos de Jerusalén: Que os quede esto bien claro y prestad atención a mis palabras: No están éstos borrachos, como vosotros suponéis, pues es la hora tercia del día, sino que es lo que dijo el profeta: Sucederá en los últimos días, dice Dios: Derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros jóvenes verán visiones y vuestros ancianos soñarán sueños. (…) Y todo el que invoque el nombre del Señor se salvará.»
Hechos de los apóstoles 2, 1-6, 14-17, 21
Jesús dice: «Si me amáis, guardaréis mis mandamientos; y yo pediré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre, el Espíritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no le ve ni le conoce. Pero vosotros le conoceréis, porque mora con vosotros. No os dejaré huérfanos: volveré a vosotros. Dentro de poco el mundo ya no me verá, pero vosotros sí me veréis, porque yo vivo y también vosotros viviréis. Aquel día comprenderéis que yo estoy en mi Padre y vosotros en mí y yo en vosotros.»
Juan 14, 15-20
Canto
Silencio
Oración de Intercesión
Ven, Espíritu Santo, haz que surja del cielo el esplendor de tu amor.
Ven, Padre de los pobres; ven, Espíritu generoso; ven, Luz de los corazones.
Tú, el perfecto Consolador, haces que en nuestra alma habite la paz: Ven, Espíritu Santo.
Tú, maravilloso frescor, en la pena, tú eres el descanso, en la prueba, la fuerza: Ven, Espíritu Santo.
Luz bondadosa, penetra la intimidad de nuestro corazón; ven, Espíritu Santo.
Ablanda nuestra rigidez, enciende nuestra tibieza; ven, Espíritu Santo.
Abreva nuestra sequedad, cura nuestra herida; ven, Espíritu Santo.
Danos la alegría que permanece; ven, Espíritu Santo, haz que brote del cielo el resplandor de tu amor.
Padrenuestro
Oración
Espíritu Santo, en cualquier situación, quisiéramos acogerte con gran sencillez. Es ante todo con la inteligencia del corazón como podemos penetrar el misterio de tu vida dentro de nosotros.
o
Que el fuego del amor de Cristo nos habite, ese amor con el que nos amó primero.
Cantos
Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, estando cerradas, por miedo a los judíos, las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: ’La paz con vosotros’. Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: ‘La paz con vosotros’. Como el Padre me envió, también yo os envío. Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: ‘Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos’. (Jn.20, 19-23)
Yo cantaré, Señor, tu gran misericordia
que es infinita,
igual que las arenas del desierto y el mar.
Yo cantaré al recordar mi historia
tu intervención en ella
que me invita a esperar.
Cada día es más fuerte en mí el deseo
de agradecer tu amor hasta la cruz,
y el caminar por donde yo rastreo
un resquicio de luz.
Presiento tu mirada, estás cercano.
Esto me hace gozar.
Y al sentirme cogida de tu mano,
todo empieza a cambiar.
Y es tanta y tan profunda mi alegría
que algo así como un cántico nuevo
he de cantar.
A la vida y al día
cantaré.
A la luz y a las cosas
cantaré.
A ti, por ti y en ti
yo cantaré.Consuelo Ojeda
Canto
Salmo
Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría,
entrad en su presencia con vítores.
Sabed que el Señor es Dios :
que él nos hizo y somos suyos,
su pueblo y ovejas de su rebaño.
Entrad por sus puertas con acción de gracias,
por sus atrios con himnos,
dándole gracias y bendiciendo su nombre :
« El Señor es bueno,
su misericordia es eterna,
su fidelidad por todas las edades. »
salmo 99
Lectura
Después de su pasión, Jesús se presentó ante los discípulos dándoles muchas pruebas de que vivía y hablándoles acerca de lo referente al Reino de Dios. (…) Los que estaban reunidos le preguntaron: «Señor, ¿es en este momento cuando vas a restablecer el Reino de Israel?» El les contestó: «A vosotros no os toca conocer el tiempo y el momento que ha fijado el Padre con su autoridad, sino que recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra.» Y dicho esto, fue levantado en presencia de ellos, y una nube le ocultó a sus ojos.
Hechos de los apóstoles 1, 3b,6-9
Antes de pasar de este mundo al Padre, Jesús rezaba así: «No te ruego sólo por estos, sino también por aquellos que, por medio de su palabra, creerán en mí, para que todos sean uno. Como tú, Padre en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno como nosotros somos uno: yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has amado a mí. Padre, los que tú me has dado, quiero que donde yo esté estén también conmigo, para que contemplen mi gloria, la que me has dado, porque me has amado antes de la creación del mundo. Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido y éstos han conocido que tú me has enviado. Yo les he dado a conocer tu Nombre y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me has amado esté en ellos y yo en ellos.»
Juan 17, 20-26
Canto
Silencio
Oración de Intercesión
Señor Jesús, después de haber dado tu vida en la cruz, tú has entrado en la gloria del Padre. Haz que toda la humanidad participe en tu vida de Resucitado.
Por medio de ti, Jesús, Dios ha hecho con nosotros una alianza nueva. Tú estás con nosotros todos los días hasta el final de los tiempos.
Jesús, tú apareciste a tus discípulos después de tu pasión. Con tu presencia en medio de nosotros, consolídanos en nuestra fe.
Jesús, tú has prometido el Espíritu Santo a los apóstoles. Que el Espíritu Consolador renueve nuestra fidelidad hacia ti.
Jesús, tú has enviado a los apóstoles a anunciar la Buena Noticia hasta los confines de la tierra. Que el Espíritu Santo nos haga testigos de tu amor.
Padrenuestro
Oración
Señor Cristo, aún teniendo una fe que trasportara montañas, sin amor ¿qué seríamos? Tú, tú nos amas. Sin tu Espíritu que habita en nuestros corazones, ¿qué seríamos? Tú, tú nos amas. Tomándolo todo sobre tí, nos abres un camino hacia la fe, esa confianza en Dios, él que no quiere ni el sufrimiento ni la aflicción humana. Espíritu de Cristo, Espíritu de compasión, Espíritu de la alabanza, tu amor por cada uno de nosotros nunca desaparecerá.
Cantos
En aquel tiempo los once discípulos fueron a Galilea, al monte que Jesús les había indicado. Y al ver a Jesús, le adoraron, aunque algunos dudaban. Jesús se acercó a ellos y les dijo: “Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced mis discípulos a todos los habitantes del mundo; bautizadlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y enseñadles a cumplir todo lo que os he mandado. Y sabed que yo estaré con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. (Mt. 28, 16-20)
Vivir de Dios…
Madre Belén
a su querer unida
buscando siempre
como agradarle más.
Vivir de Dios…
amando con locura
lo más intensamente
que un alma puede amar.
Vivir de Dios…
sacrificando todo
y en despojo completo
seguirle con afán.
Vivir de Dios…
a su Cruz abrazada
siendo mi mayor pena
no poder sufrir más.
Vivir de Dios…
en trabajo incesante
llevándole a las almas
la paz y la verdad.
Vivir de Dios…
en oración constante
cual si nada en la tierra
me pudiera estorbar.
Vivir de Dios…
y muriendo a mí misma
en un martirio lento
de abnegación total.
Vivir de Dios…
es todo cuanto anhelo
para en El transformarme
con perfecta unidad.
* El mundo en nuestras manos…???. ¡El mundo en manos de Dios!* Siempre hay preguntas que nos llevan a Él
* Pastoral de interrogantes: un camino hacia Dios.
* Cuando la vida nos pregunta, …, nos coloca en nuestro sitio(el de criatura) y Dios se desvela haciéndose cargo de nosotros.
* ¡Cuánto más me adentro en los misterios del mundo, de la vida, de cada ser humano, más pequeña me siento y más noto la presencia de Dios en todo!
* Hombre, mujer ¿quién eres?
* “ ¿qué es el hombre Señor para que te acuerdes de él?”
* La realidad siempre tiene interrogantes, que esconden la presencia de Dios.
* Si yo no me pregunto por la “vida”, la vida se encargará de preguntarme.
* ¿Qué actitud tengo frente a la vida, la realidad, mi mundo y el mundo?
* Y quiso el hombre ser como Dios, … y Dios hacerse hombre, y se hizo nada!
* Y a ti ¿qué te sugiere?
Si me amáis, guardaréis mis mandamientos; y yo pediré al Padre y os dará otro Paráclito, para que esté con vosotros para siempre, el Espíritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no le ve ni le conoce. Pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros. No os dejaré huérfanos: volveré a vosotros. Dentro de poco el mundo ya no me verá, pero vosotros si me veréis, porque yo vivo y también vosotros viviréis. Aquel día comprenderéis que yo estoy en mi Padre y vosotros en mí y yo en vosotros. El que tiene mis mandamientos y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ame, será amado de mi Padre; y yo le amaré y me manifestaré a él. (Jn.14, 15-21)