Marcelo Spínola puso el Corazón de Jesús en el centro del escudo de nuestra Congregación. Era expresión de que el Corazón de Cristo debía ser en la vida de la Congregación y en la de cada Esclava lo que era en la suya propia: conocimiento experimental, vivencial y hondo del amor personal de Jesucristo, y raíz de todo el quehacer apostólico.
28 de junio de 2019